Gays, Lesbianas y Trans limeños lo dijeron fuerte y claro: No somos enfermos, no tenemos nada "malo".

Diario de Lima Gay - 12 de setiembre de 2009

Pacífico pero fuerte y claro, así fue el segundo plantón realizado por activistas gays, lesbianas y trans limeños para manifestar su rechazo ante las posiciones religiosas fundamentalistas que se oponene a sus legítimo derecho de amar y ser felices ofreciendo "cura" y "restauración" para la homosexualidad.

Varias decenas de personas, muchísimas más que la mañana anterior, se hiceron presentes en la esquina de Schell y La Paz, en el centro de Miraflores , frente al local donde se realizaba la IV Convencion Latinoamericana Salvemos la Familia y la Conferencia Homosexualidad:Mitos y Verdades, con presencia de personas que supuestamente se han "curado" de seu homosexualidad.

El rechazo a la pretensión de que amar a alguien del mismo sexo es "malo" o "demoniaco" fue unánime. Llegaron personas de todas las edades, aunque se notó el predominio de jóvenes de agrupaciones universitarias. También llegó la prensa, el programa "Enemigos Intimos" hizo una amplia cobertura de la sincidencias tanto dentro como fuera de la Convención.

Algunos de los organizadores y participantes en el congreso salieron y conversaron con los activistas resaltando que "aman" a los homosexuales pero a la vez subrayando que la homosexualidad es una equivocación,casusada por la influencia del demonio y que quienes somos homosexuales estamos "actuando contra el designio de Dios" al no integrarnos al sitema familiar patriarcal y sexista que ellos propugnan como "único correcto".

A pesar que se intentó imponer la consigna de no dialogar por parte de algunos de los grupos presentes en el plantón, en realidad los pocos momentos en que se puedo dialogar con los "cristianos" fueron lo más interesante de la velada. Por ejemplo, un grupo se reunió en torno a un pastor norteamericano, cuya posición parcialmente disidente del mensaje fundamentalista, dio lugar a una larga e ilustrativa conversación en Inglés.

Y, mientras en el interior algunos jóvenes y muchachas "restaurados" recibían espadas y coronas como símbolo de su "hombría" o "feminidad" recuperadas, en la calle los activistas continuaban celebrando la diversidad en su pacífica pero contundente protesta si mayores inconvenientes, a pesar de algunos pocos momentos de tensión con la policía que fue-nuevamente- llamada para "proteger" a los reunidos dentro del Centro de Convenciones Maria Angola".