AFP-12 de agosto de 2011
La transexual Wendy Iriepa y el homosexual Ignacio Estrada (foto) han invitado a su boda el sábado a opositores, diplomáticos de la Sección de Intereses de Washington en La Habana, activistas de la comunidad LGBT, al Cenesex y a Mariela Castro
La transexual Wendy Iriepa dijo hoy viernes que no desea que su boda con el homosexual Ignacio Estada el mismo día del cumpleaños de Fidel Castro “sea vista como algo político”, reportó AFP.
“No quiero que (la boda) sea vista como algo político, aunque es un regalo para Fidel y no me preocupa lo que piense el gobierno”, expresó Iriepa, de 37 años.
La boda, que se celebra en el palacio Mayía Rodríguez, en La Habana, será la primera de su tipo en Cuba y no ha estado exenta de polémica.
La pareja considera que su casamiento “marca una nueva etapa en Cuba” y es un “regalo” a Fidel Castro, quien hace un año admitió su responsabilidad en la exclusión que sufrieron los homosexuales en los años sesenta, cuando eran recluidos en los campos de trabajo llamados UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción).
“No es un acto de provocación. Es un reconocimiento, por primera vez en 52 años de revolución reconoció su culpa, aunque eso no lo exime completamente”, comentó Estrada sobre las declaraciones de Castro.
Según el reporte de la AFP, los novios iban este viernes a escoger el ramo a la floristería Aves del Paraíso, en la capital cubana.
Iriepa ha dicho que a sus 37 años cumple el “sueño de toda mujer”, tras haber sido sometida en 2007 a la cirugía de cambio de sexo gratis, una operación aprobada por gestión del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), que dirige Mariela Castro, hija del presidente Raúl Castro.
Antes de comprometerse en matrimonio con Estrada, Iriepa era promotora de salud del Cenesex, muy cercana a Castro, pero fue expulsada a raíz de conocerse su relación con Estrada, quien es miembro de la organización disidente Observatorio Cubano de los Derechos LGBT.
Ella cuenta que Mariela Castro rechazó ser su madrina cuando supo que se casaba con un opositor. Ahora lo será la bloguera opositora Yoani Sánchez, quien anunció el enlace con un “¡No se lo pierdan! Cobertura minuto a minuto vía Twitter”.
“Han colocado a nuestro país en el tercer milenio, en el anhelado tiempo del 'ahora'“, escribió Sánchez en su blog, Generación Y.
Las nupcias del sábado son posibles porque Wendy Iriepa tiene ya su carné de identidad con su nombre de mujer.
Ignacio dijo que se quedó sin aliento cuando vio a Iriepa entrar en las oficinas del Cenesex el 13 de mayo. Dos días después la invitaba a salir. A la semana ya vivían juntos. Tres meses después: la boda. Un amor meteórico, “química total” en el decir de Wendy.
“Siempre dije que era gay. Pero con Wendy es totalmente diferente, por primera vez en mi vida me confieso confundido, hoy no sé ni lo que soy, lo que realmente sé es que estoy enamorado de una mujer”, afirmó Estrada.
Por su parte, Wendy Iriepa comentó: “Es gay pero es hombre, tiene un pene y me hace feliz. Él es una cajita de sorpresas. Yo tuve un pene, que usé en una época porque tuve que prostituirme. Si debo recurrir a un juguete sexual para complacerlo, lo voy a hacer”.
“Nuestra boda será un canto a la libertad, por los derechos de la comunidad LGBT”, afirmó Estrada.
Al casamiento están invitados opositores, entre ellos las Damas de Blanco, diplomáticos de la Sección de Intereses de Washington en La Habana, activistas de la comunidad LGBT, el Cenesex, la propia Mariela Castro y hasta los curiosos, comentaron los novios.
“Arriba de nuestra cama nos envolvemos en la bandera de la diversidad, cualquier cosa puede pasar ahí. Somos una gama de colores”, dice Wendy.
“Vamos a tener más miel desde la luna”, indicó Estrada.
La pareja considera que su casamiento “marca una nueva etapa en Cuba” y es un “regalo” a Fidel Castro, quien hace un año admitió su responsabilidad en la exclusión que sufrieron los homosexuales en los años sesenta, cuando eran recluidos en los campos de trabajo llamados UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción).
“No es un acto de provocación. Es un reconocimiento, por primera vez en 52 años de revolución reconoció su culpa, aunque eso no lo exime completamente”, comentó Estrada sobre las declaraciones de Castro.
Según el reporte de la AFP, los novios iban este viernes a escoger el ramo a la floristería Aves del Paraíso, en la capital cubana.
Iriepa ha dicho que a sus 37 años cumple el “sueño de toda mujer”, tras haber sido sometida en 2007 a la cirugía de cambio de sexo gratis, una operación aprobada por gestión del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), que dirige Mariela Castro, hija del presidente Raúl Castro.
Antes de comprometerse en matrimonio con Estrada, Iriepa era promotora de salud del Cenesex, muy cercana a Castro, pero fue expulsada a raíz de conocerse su relación con Estrada, quien es miembro de la organización disidente Observatorio Cubano de los Derechos LGBT.
Ella cuenta que Mariela Castro rechazó ser su madrina cuando supo que se casaba con un opositor. Ahora lo será la bloguera opositora Yoani Sánchez, quien anunció el enlace con un “¡No se lo pierdan! Cobertura minuto a minuto vía Twitter”.
“Han colocado a nuestro país en el tercer milenio, en el anhelado tiempo del 'ahora'“, escribió Sánchez en su blog, Generación Y.
Las nupcias del sábado son posibles porque Wendy Iriepa tiene ya su carné de identidad con su nombre de mujer.
Ignacio dijo que se quedó sin aliento cuando vio a Iriepa entrar en las oficinas del Cenesex el 13 de mayo. Dos días después la invitaba a salir. A la semana ya vivían juntos. Tres meses después: la boda. Un amor meteórico, “química total” en el decir de Wendy.
“Siempre dije que era gay. Pero con Wendy es totalmente diferente, por primera vez en mi vida me confieso confundido, hoy no sé ni lo que soy, lo que realmente sé es que estoy enamorado de una mujer”, afirmó Estrada.
Por su parte, Wendy Iriepa comentó: “Es gay pero es hombre, tiene un pene y me hace feliz. Él es una cajita de sorpresas. Yo tuve un pene, que usé en una época porque tuve que prostituirme. Si debo recurrir a un juguete sexual para complacerlo, lo voy a hacer”.
“Nuestra boda será un canto a la libertad, por los derechos de la comunidad LGBT”, afirmó Estrada.
Al casamiento están invitados opositores, entre ellos las Damas de Blanco, diplomáticos de la Sección de Intereses de Washington en La Habana, activistas de la comunidad LGBT, el Cenesex, la propia Mariela Castro y hasta los curiosos, comentaron los novios.
“Arriba de nuestra cama nos envolvemos en la bandera de la diversidad, cualquier cosa puede pasar ahí. Somos una gama de colores”, dice Wendy.
“Vamos a tener más miel desde la luna”, indicó Estrada.
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