HuffingtonPost /Foto:USAToday
El presidente Barack Obama firmó hoy lunes una orden ejecutiva que prohíbe la discriminación en el ambito laboral contra lesbianas, gays, bisexuales y transexuales empleados en empresas que tienen contratos federales y en el gobierno federal.
La orden ejecutiva tiene dos partes: Hace que sea ilegal despedir o acosar a los empleados de los contratistas federales en base a su orientación sexual o identidad de género, y se prohíbe expresamente la discriminación contra los empleados transgénero del gobierno federal. La parte focalizada en contratistas federales afecta a 24.000 empresas que dan empleo a unos 28 millones de trabajadores, es decir una quinta parte de la fuerza laboral de los EE.UU.
"Los contratos del gobierno federal de los Estados Unidos no deben subsidiar la discriminación contra el pueblo estadounidense", dijo Obama durante un discurso en la Casa Blanca antes de firmar la orden. "Voy a hacer lo que puedo con la autoridad que tengo para actuar."
La disposición que afecta a los empleados federales surte efecto de inmediato, mientras que para los empleados de los contratistas federales tendrán la disposición entrará en vigencia a principios del próximo año, de acuerdo con altos funcionarios del gobierno.
Para alivio de la comunidad LGBT, Obama no incluyó una exención religiosa radical en la orden ejecutiva - algo que la comunidad temía podría ocurrir a raíz del fallo de la Corte Suprema en el caso Hobby Lobby.
Obama simplemente añadió las categorías de orientación sexual e identidad de género de una orden ejecutiva existente que protege a los empleados de los contratistas federales de la discriminación basada en la raza, color, religión, sexo u origen nacional. El presidente George W. Bush modificó ese orden ejecutiva en 2002 para permitir a los contratistas federales de filiación religiosa dar prioridad a la contratación de empleados de su religión particular. Obama ha mantenido esa parte intacta.
La orden ejecutiva tiene dos partes: Hace que sea ilegal despedir o acosar a los empleados de los contratistas federales en base a su orientación sexual o identidad de género, y se prohíbe expresamente la discriminación contra los empleados transgénero del gobierno federal. La parte focalizada en contratistas federales afecta a 24.000 empresas que dan empleo a unos 28 millones de trabajadores, es decir una quinta parte de la fuerza laboral de los EE.UU.
"Los contratos del gobierno federal de los Estados Unidos no deben subsidiar la discriminación contra el pueblo estadounidense", dijo Obama durante un discurso en la Casa Blanca antes de firmar la orden. "Voy a hacer lo que puedo con la autoridad que tengo para actuar."
La disposición que afecta a los empleados federales surte efecto de inmediato, mientras que para los empleados de los contratistas federales tendrán la disposición entrará en vigencia a principios del próximo año, de acuerdo con altos funcionarios del gobierno.
Para alivio de la comunidad LGBT, Obama no incluyó una exención religiosa radical en la orden ejecutiva - algo que la comunidad temía podría ocurrir a raíz del fallo de la Corte Suprema en el caso Hobby Lobby.
Obama simplemente añadió las categorías de orientación sexual e identidad de género de una orden ejecutiva existente que protege a los empleados de los contratistas federales de la discriminación basada en la raza, color, religión, sexo u origen nacional. El presidente George W. Bush modificó ese orden ejecutiva en 2002 para permitir a los contratistas federales de filiación religiosa dar prioridad a la contratación de empleados de su religión particular. Obama ha mantenido esa parte intacta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario