La ley sobre el matrimonio homosexual aprobada en febrero pasado por el parlamento portugués es constitucional, declaró ayer la Corte Constitucional de Portugal. La Corte se pronunció a pedido del presidente de centro derecha Aníbal Cavaco Silva, católico practicante, que había expresado dudas sobre la constitucionalidad de la ley.
La ley, adoptada por la mayoría de izquierda del parlamento, modifica la definición del matrimonio en el código civil, suprimiendo la referencia “sexo diferente”.
Por otra parte, la ley niega a las parejas homosexuales en forma explícita el derecho de adopción.
La Corte estimó que la Constitución “no prohíbe la evolución de la institución” del matrimonio y que su extensión “a personas del mismo sexo no impide el reconocimiento y la protección de la familia como elemento fundamental de la sociedad”.
SE PUEDE VETAR
El presidente dispone ahora de un plazo de 20 días para promulgar la ley o vetarla, lo que implicaría un nuevo voto del parlamento.
Según los medios de comunicación locales, tanto el gobierno como la jerarquía católica desean que el asunto del matrimonio homosexual quede definitivamente cerrado antes de la visita del papa Benedicto XVI a Portugal, prevista del 11 al 14 de mayo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario