20 de diciembre de 2012
La Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado chilno reactivó la tramitación del Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) en una jornada que contó con la asistencia de la vocera de Gobierno Cecilia Pérez, así como de abogados y de organizaciones favorables y opositoras a la norma.
En la ocasión el presidente de la Comisión, Hernán Larraín (UDI), señaló que la tramitación del AVP no obedecerá a “jugarretas políticas”, al tiempo que aclaró que el debate del proyecto no cesará “hasta que sea despachado”. De Igual manera, abrió la posibilidad de que el proyecto sea fusionado con el Acuerdo de Vida en Común (AVC), presentado por el ex senador Andrés Allamand el 2010.
La Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado chilno reactivó la tramitación del Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) en una jornada que contó con la asistencia de la vocera de Gobierno Cecilia Pérez, así como de abogados y de organizaciones favorables y opositoras a la norma.
En la ocasión el presidente de la Comisión, Hernán Larraín (UDI), señaló que la tramitación del AVP no obedecerá a “jugarretas políticas”, al tiempo que aclaró que el debate del proyecto no cesará “hasta que sea despachado”. De Igual manera, abrió la posibilidad de que el proyecto sea fusionado con el Acuerdo de Vida en Común (AVC), presentado por el ex senador Andrés Allamand el 2010.
La ministra secretaria general de Gobierno, Cecilia Pérez, aclaró ayer ante la Comisión de Constitución del Senado que
el objetivo del proyecto de ley de Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) es entregar "dignidad y respeto" a más de tres millones de parejas que no han formalizado legalmente su vínculo, lo cual es algo distinto frente a la posición del Ejecutivo frente al matrimonio homosexual.
Durante el inicio de la discusión en la Cámara Alta, la vocera de La Moneda destacó que "esta iniciativa pretende hacer visible y evidente algo que existe hace muchos años en nuestra sociedad: La existencia de parejas de igual o distinto sexo que conviven".
"La última encuesta CASEN arrojó la existencia de cerca de un millón de parejas de hecho en nuestro país, de un total de 3 millones de parejas. Son casi un tercio de las parejas en Chile. Al hablar de cerca de un millón de parejas que conviven heterosexuales y homosexuales, hablamos de dos millones de personas adultas que están en esta situación", indicó.
En ese sentido, destacó que "el corazón de esa iniciativa es sólo uno: entregarles dignidad a todas las familias y, en este caso, a aquellas que no tienen un vínculo dado por el matrimonio o los hijos, pero son fruto del amor y merecen tener aquello que respete la dignidad de esa relación".
Sin embargo, Pérez subrayó que "la postura de nuestro gobierno ha sido clara desde el primer día: el matrimonio es sólo uno, y por esencia es entre un hombre y una mujer. El Presidente y los ministros de nuestro gobierno hemos insistido en reiteradas oportunidades al respecto, y abogado por la defensa de la institución matrimonial, bajo estas características".
No obstante, la secretaria de Estado explicó que "con la misma fuerza y claridad con que le damos importancia a la defensa de la familia tradicional o nuclear, de padres unidos por vínculo matrimonial e hijos, nuestro país debe hacerse cargo de las múltiples formas o expresiones de familias. Familias monoparentales, familias extendidas, convivientes, familias de parientes consanguíneos".
Por ello, la ministra aseveró que "la idea de nuestro Proyecto de Ley que Crea el Acuerdo de Vida en Pareja es justamente reconocer la existencia de estas familias, darles dignidad y respeto, para que cuenten con el apoyo del Estado. Es nuestra obligación incorporarlos a nuestra institucionalidad".
En esa línea, agregó que "todos sabemos que existen diferencias entre nosotros, entre todos los seres humanos, pero esas diferencias no deben ser motivo para discriminar. Mucho menos el tipo de unión que pueden tener dos seres humanos. Estas personas necesitan que se les protejan sus derechos de acceso a la salud, a la previsión, a la herencia y a otros beneficios sociales, entre otras cosas".
"Nuestro proyecto pretende remover los obstáculos que hoy les impiden ese acceso, pretende eliminar las discriminaciones arbitrarias existentes, de forma de avanzar hacia una sociedad inclusiva y acogedora y no excluyente ni castigadora", concluyó.
¿Qué es el AVP o Acuerdo de vida en Pareja?
Según establece el proyecto enviado por el Ejecutivo, es un contrato que pueden celebrar personas del mismo o distinto sexo para regular aspectos jurídicos o patrimoniales derivados de su convivencia afectiva. La iniciativa no altera el estado civil de quienes lo contratan.
¿Quiénes pueden conformar un AVP?
Un AVP puede celebrarse entre dos personas mayores de edad, quienes no tengan un vínculo matrimonial u otro AVP vigente. No podrán contraer el acuerdo quienes tienen lazos sanguíneos en hasta por segundo grado.
el objetivo del proyecto de ley de Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) es entregar "dignidad y respeto" a más de tres millones de parejas que no han formalizado legalmente su vínculo, lo cual es algo distinto frente a la posición del Ejecutivo frente al matrimonio homosexual.
Durante el inicio de la discusión en la Cámara Alta, la vocera de La Moneda destacó que "esta iniciativa pretende hacer visible y evidente algo que existe hace muchos años en nuestra sociedad: La existencia de parejas de igual o distinto sexo que conviven".
"La última encuesta CASEN arrojó la existencia de cerca de un millón de parejas de hecho en nuestro país, de un total de 3 millones de parejas. Son casi un tercio de las parejas en Chile. Al hablar de cerca de un millón de parejas que conviven heterosexuales y homosexuales, hablamos de dos millones de personas adultas que están en esta situación", indicó.
En ese sentido, destacó que "el corazón de esa iniciativa es sólo uno: entregarles dignidad a todas las familias y, en este caso, a aquellas que no tienen un vínculo dado por el matrimonio o los hijos, pero son fruto del amor y merecen tener aquello que respete la dignidad de esa relación".
Sin embargo, Pérez subrayó que "la postura de nuestro gobierno ha sido clara desde el primer día: el matrimonio es sólo uno, y por esencia es entre un hombre y una mujer. El Presidente y los ministros de nuestro gobierno hemos insistido en reiteradas oportunidades al respecto, y abogado por la defensa de la institución matrimonial, bajo estas características".
No obstante, la secretaria de Estado explicó que "con la misma fuerza y claridad con que le damos importancia a la defensa de la familia tradicional o nuclear, de padres unidos por vínculo matrimonial e hijos, nuestro país debe hacerse cargo de las múltiples formas o expresiones de familias. Familias monoparentales, familias extendidas, convivientes, familias de parientes consanguíneos".
Por ello, la ministra aseveró que "la idea de nuestro Proyecto de Ley que Crea el Acuerdo de Vida en Pareja es justamente reconocer la existencia de estas familias, darles dignidad y respeto, para que cuenten con el apoyo del Estado. Es nuestra obligación incorporarlos a nuestra institucionalidad".
En esa línea, agregó que "todos sabemos que existen diferencias entre nosotros, entre todos los seres humanos, pero esas diferencias no deben ser motivo para discriminar. Mucho menos el tipo de unión que pueden tener dos seres humanos. Estas personas necesitan que se les protejan sus derechos de acceso a la salud, a la previsión, a la herencia y a otros beneficios sociales, entre otras cosas".
"Nuestro proyecto pretende remover los obstáculos que hoy les impiden ese acceso, pretende eliminar las discriminaciones arbitrarias existentes, de forma de avanzar hacia una sociedad inclusiva y acogedora y no excluyente ni castigadora", concluyó.
¿Qué es el AVP o Acuerdo de vida en Pareja?
Según establece el proyecto enviado por el Ejecutivo, es un contrato que pueden celebrar personas del mismo o distinto sexo para regular aspectos jurídicos o patrimoniales derivados de su convivencia afectiva. La iniciativa no altera el estado civil de quienes lo contratan.
¿Quiénes pueden conformar un AVP?
Un AVP puede celebrarse entre dos personas mayores de edad, quienes no tengan un vínculo matrimonial u otro AVP vigente. No podrán contraer el acuerdo quienes tienen lazos sanguíneos en hasta por segundo grado.
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