Tras salir del penal de mujeres de Chorrillos y reunirse posteriormente con su familia entre lágrimas y apretones de emoción, la cantante Abencia Meza agradeció haber pasado seis meses recluida en Santa Mónica, pues, según confesó, dentro aprendió lo que es realmente la vida.
Luego de volver a gozar de su libertad, Abencia llegó hasta su domicilio en Los Olivos, donde fue recibida por su hijo Josmel Lugo y su hermana Olga. El reencuentro vino cargado de besos, fortísimos abrazos y llanto.
“Solo les pido que me perdonen si les falle en algo. Agradezco haber llegado al penal Santa Mónica porque ahí he aprendido lo que es la vida. Pero no le desearía a nadie la cárcel”, comentó entre sollozos la Reina de las Parranditas para las cámaras del noticiero ’90 Segundos’.
Tras las emotivas palabras, Abencia se dirigió a los cientos de fanáticos que esperaban por ella en los alrededores de su casa. “Los amo. Gracias”, dijo la cantante mientras no paraba de lanzar besos desde su balcón.
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