Una jueza de California ha declarado inconstitucional la Ley Don't ask, don't tell (No preguntes, no digas) que impide a los homosexuales servir en el Ejército si declaran que lo son. La polémica norma discriminatoria ha sido derogada a petición del grupo gay conservador Log Cabin Republicans.
La ley fue aprobada en 1993 por el presidente Bill Clinton en un extraño compromiso que se quiso interpretar como un intento de discriminación positiva; es decir, se decía que la norma permitía a los homosexuales entrar en el Ejército pero, a cambio, tenían que callar su condición.
La juez del Distrito Central de California, Virginia A. Phillips, considera sin embargo que la ley constituye una grave discriminación entre los heterosexuales, que pueden hablar abiertamente de su orientación sexual, y los homosexuales, que tienen que esconderla, violando así la libertad de expresión reconocida en la Constitución.
Tras escuchar diversos testimonios, la magistrada considera, además, que la ley no tiene nada que ver con estar preparado o no para servir en el Ejército, pero sí genera, en cambio, "un efecto negativo" en las Fuerzas Armadas.
Según los cálculos de Log Cabin, 13.500 militares han sido expulsados del Ejército estadounidense desde que entró en vigor la ley de Clinton. Obama prometió que la derogaría, pero hasta ahora no lo había hecho.
Momento histórico
"Este es un momento histórico y una sentencia histórica para la comunidad gay militar, y para la preparación y la integridad de nuestras Fuerzas Armadas", dijo tras conocerse el fallo Alexander Nicholson, miembro de Log Cabin, que fue expulsado del Ejército al conocerse su condición homosexual.
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