Las personas heterosexuales homofóbicas mueren en promedio 2,5 años más jóvenes que los y las heterosexuales no prejuiciosos de acuerdo con un nuevo estudio realizado por las universidades de Columbia y Nebraska y publicado en la revista American Journal of Public Health.
El estudio encontró tasas de mortalidad más altas entre las personas homofóbicas, independientemente de su condición económica , social y otros factores de salud.
Hay un precio a pagar por la homofobia y es un precio alto: Aproximadamente dos años y medio menos de esperanza de vida. Esa es la conclusión de un nuevo y provocativo trabajo de investigación
que examina las actitudes sociales y las tasas de mortalidad de una
muestra grande y representativa de los estadounidenses durante las
dos últimas décadas. "Hemos encontrado pruebas de que el prejuicio anti-gay se asocia con un riesgo elevado de mortalidad entre los heterosexuales , aun por sobre múltiples factores de riesgo establecidos", escribe un equipo de investigación dirigido por Mark Hatzenbuehler , de la Universidad de Columbia. "En particular, hubo una diferencia la esperanza de vida de 2,5 años entre los individuos con alto versus bajo nivel de prejuicio anti- gay." La causa, escriben los investigadores en el American Journal of Public Health es que puede haber niveles de estrés más elevados en las personas homofóbicas. Al parecer, todo ese malestar intenso tien un efecto físico.
Hatzenbuehler y sus colegas Anna Bellatorre y Peter Muennig analizaron datos de la Encuesta Social General, que ha seguido las actitudes y comportamientos de los estadounidenses desde 1972, y el Índice Nacional de Defunciones , que recopila la información de los registros de defunción. Se centraron específicamente en las actitudes hacia la homosexualidad , como se informa en las encuestas GSS 1988-2002 . La homofobia se midió observando las respuestas a cuatro preguntas específicas, incluyendo "¿Cree usted que las relaciones sexuales entre dos adultos del mismo sexo estan siempre mal, casi siempre está mal , están mal sólo a veces, o no están mal en absoluto?" y "¿Deberia permitirse a un hombre que admite ser homosexual enseñar en un colegio o universidad, o no?.
"La muestra final incluyó 20.226 heterosexuales estadounidenses. Diecinueve por ciento de ellos o 4216 , habían muerto en el año 2008. Después de ajustar tomando en cuenta una variedad de factores que influyen en la salud y la mortalidad, como la edad, raza, estado civil, ingreso y educación, los investigadores encontraron que el prejuicio anti- gay estaba "significativamente asociado con una elevada mortalidad" lo que resulta en "una diferencia de esperanza de una vida de aproximadamente 2,5 años."
Aunque no encontraron ninguna relación entre la homofobia y las muertes por cáncer, el sesgo anti- gay "se asoció específicamente con causas de muerte relacionadas con enfermedades cardiovasculares entre los heterosexuales", escriben.
Los investigadores no tienen una respuesta definitiva con respecto a las causas de estas muertes prematuras, pero sí ofrecen algunas ideas.
"La evidencia existente sugiere que, para las personas altamente prejuiciadas, las interacciones intergrupales son estresantes", señalan. "El estrés a su vez se asocia con comportamientos menos saludables, como comer en exceso, fumar y beber en exceso. Estos comportamientos de salud son por lo tanto posibles mecanismos que vinculan la mortalidad con el prejuicio anti-gay ".
Hatzenbuehler y sus colegas informan que fueron "incapaces de determinar si se trata de los prejuicios contra los homosexuales en particular, o el prejuicio en términos más generales, lo que se asocia con la mortalidad entre los miembros del grupo mayoritario." Sin embargo, añaden, "nuestro análisis de sensibilidad indica que el prejuicio anti-gay aumenta el riesgo de mortalidad con más fuerza que el prejuicio racial. "Esto sugiere que es algo muy bueno que las actitudes de los estadounidenses hacia la homosexualidad hayan estado moviendo en dirección de la tolerancia y la aceptación en los últimos años. Esta investigación sugiere que un cambio de este tipo puede producir un beneficio secundario inesperado: una vida más larga.
"Estos hallazgos", concluyen los investigadores, "contribuyen a un creciente cuerpo de investigación que sugiere que la reducción de los prejuicios puede mejorar la salud tanto de las minorías como de las poblaciones mayoritarias ".
Fuente: Alternet
En Español: JCHR/ DLG
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