William "Billy" Haines fue una de las principales estrellas de cine en 1930 debido a su personalidad fuerte y sin complejos en las pantallas. Cuando MGM le dio un ultimátum para que eligiera entre su carrera y su pareja homosexual, no lo pensó dos veces.
Traducción de First Openly Gay Hollywood Star William Haines Was Told to Leave His Partner for Acting Career
En la serie "Hollywood" de Netflix, Henry Wilson (interpretado por Jim Parsons) hizo un comentario sobre Billy Haines, el actor al que se le dijo que eligiera entre su amante y su carrera, y él eligió a su amante.
Resulta que la historia es real. William “Billy” Haines, también llamado el "Wisecracker (bromista), era una de las principales estrellas de Hollywood que solía ser vista en estrenos y fiestas con su pareja del mismo sexo, Jimmie Shields.
La franqueza de Haines sobre su sexualidad era bastante diferente a la de sus contemporáneos, que también eran homosexuales. En ese momento, la homosexualidad era un tema tabú y la mayoría de los homosexuales preferirían permanecer en matrimonios cisgénero y fingir que eran heterosexuales. Hasta 1930, su enfoque audaz con respecto a su sexualidad no fue un problema, pero la introducción del Código de Producción Hays, un conjunto de pautas morales de la industria que los principales estudios de producción tuvieron que cumplir, cambió todo.
El código se estableció después de una serie de escándalos que involucraron a estrellas de Hollywood en 1920. En un esfuerzo por rehabilitar la imagen de Hollywood, la Comisión Federal de Comercio pasó la lista de "qué hacer y qué no hacer" y de qué "tener cuidado". La lista incluía la prohibición de "comportamientos homosexuales". Al principio, Haines, debido a su estatus de estrellato, pudo quitar la cláusula de su contrato y seguir actuando. Sin embargo, cuando varias de sus películas no tuvieron un buen desempeño en taquilla, se vio obligado a cumplir con los códigos.
El actor, sin embargo, alcanzó el estatus de estrella porque su "homosexualidad" era parte de su personalidad. Según William J. Mann, autor de "Wisecracker: The Life and Times of William Haines": "El 'bromista' [...] trajo su personalidad abiertamente gay y sin complejos a sus interpretaciones en la pantalla, incluso cuando estaba interpretando (un personaje) ostensiblemente heterosexual".
Definitivamente fue un ejemplo de autenticidad e integridad en una época en la que no había modelos a seguir. Tiene sentido que cuando MGM lo empujó a elegir entre su relación con Jimmie Shields y su carrera como actor de Hollywood, Haines no cambiara para adaptarse a las expectativas de los demás. Incluso si eso significaba dejar atrás toda una carrera exitosa. El autor agregó:
"El hecho de que pudo hacer eso y convertirse en la principal estrella de taquilla de 1930, es porque no pretendía ser otra cosa que lo que era, y la industria sabía que era gay".
El rumor ddice que Haines fue llamado por uno de los productores de MGM para pedirle que suavizara su "extravagante homosexualidad" en la pantalla. Sin embargo, dado que sus películas no estaban funcionando tan bien como esperaban, se le dio el ultimátum. El productor Louis B. Mayer de MGM llamó a Haines a su oficina y le exigió al actor que buscara esposa y se casara. ¿Su respuesta? "Estoy casado", y agregó que solo renunciaría a su compañero de vida Shields si Mayer también renunciaba a su esposa. Eso, por supuesto, nunca sucedió, por lo que Haines se alejó de su carrera en Hollywood, reafirmando su identidad queer como parte de quién era.
Haines supo desde muy joven quién era. Nacido en un pueblo muy pequeño de Virginia, Haines se fue de casa cuando solo tenía 14 años con un supuesto "novio". Su fuga lo llevó a la ciudad de Nueva York y a algunos pequeños trabajos de modelaje y actuación. Ganó un concurso en 1922 de Goldwyn Studios, lo que le ayudó a iniciar su carrera en Hollywood. Más tarde, tras mudarse a Los Ángeles, se cruzó con Shields cuando estaba de viaje a Nueva York. Estarían juntos durante los próximos 47 años, convirtiéndose en la primera pareja abiertamente gay en Hollywood.
Cuando despidieron a Haines por no cumplir con las nuevas reglas, tuvo que reinventarse. Dejó su carrera como actor y se convirtió en diseñador de interiores, casi por accidente. Años antes del incidente, Haines ya era copropietario de una tienda de antigüedades. Su casa tenía una decoración impecable y era prácticamente una muestra de su talento. Su buena amiga Joan Crawford se convirtió en uno de sus primeros clientes. Crawford era su mejor amiga y como era fan de su gusto como diseñador, lo contrató para su primer gran proyecto. Ella animó a todos los demás amigos de Hollywood a seguir su ejemplo, lo que lo llevó a codearse con grandes nombres como Carole Lombard, Nancy y Ronald Reagan. Haines se convirtió en un diseñador de interiores tan establecido que incluso rechazó un regreso a las pantallas. Billy Wilder lo invitó a interpretar una "figura de cera" en "Sunset Boulevard", pero él se negó de inmediato.
Su gusto único y elegante por el diseño lo convirtió en uno de los nombres y referencias del diseño más prominentes de Hollywood en ese momento. Haines reemplazaría los muebles oscuros y serios con piezas bajas coloridas y refinadas, papeles pintados a mano y antigüedades inglesas. Algunos directores de cine también incorporaron la estética de Haines en sus películas. La colección de arte personal del ex actor se utilizó en la película "Lo que el viento se llevó". En "Hollywood" de Netflix, se mostró una escena en el comedor de George Cukor que fue decorada por Haines.
Sin embargo, la historia de amor de Haines y Shields estuvo lejos de ser perfecta. En 1936, una turba de supremacistas blancos atacó a los dos hombres y fue noticia en ese momento. Uno puede imaginar, sin embargo, que podrían haber sufrido otros incidentes que el público no conocía. Su hermosa historia de amor terminó después de casi cinco décadas juntos cuando Haines falleció de cáncer de pulmón en 1973. Su compañero Shields no pudo soportar el dolor y se quitó la vida, dejando una nota que decía que no podía seguir sin el hombre que él amó.
Después de tantos años, William Haines sigue siendo una leyenda y un ejemplo de autenticidad. El autor de sus memorias dijo que mantener su integridad y defender su verdad le hizo reconocer que hay cosas más importantes en la vida que las materiales. Haines sentó las bases y abrió muchas puertas para que las personas en el competitivo mundo del espectáculo vivieran su verdad y fueran ellos mismos.
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