domingo, 19 de abril de 2015

En Alemania la abuela Marie a sus 84 años renuncia a su Iglesia en defensa de sus nietos gay


Marie, una abuela alemana de 84 años pidio ser des-bautizado, es decir apostatar de su iglesia, en defensa a sus dos nietos gays. La carta de apostatía de la mujer  fue publicada por uno de sus nietos en Facebook y se convirtió en viral.  La renuncia a la Iglesia protestante de Marie fue motivada por un servicio dominical televisado en el que un sacerdote explicó que la homosexualidad es un pecado que va en contra de la voluntad de Dios y debe ser curada.

Los medios sociales en Alemania, sobre todo Facebook, han encontrado una nueva heroína. La ira y la indignación de la anciana, causada por las declaraciones televisivas anti-gay de un pastor de un pueblo cercano al suyo, la llevó a dejar la Iglesia protestante.
 
Carta de la abuela apostatnado de su Iglesia
 La señora de 84 años es  abuela de dos nietos gays, y no aceptó que un representante de su religión haya definido la orientación sexual de sus nietos como un pecado contra Dios. La mujer, por consejo de uno de sus nietos, según informa Spiegel Online, escribió una carta  en la que denunció con valentía la propuesta de curar a los gays como totalmente irresponsable. Según ella, declaraciones similares podrían llevar a los nchicos  y chicas más jóvenes por un camino muy peligroso al causarles sentimientos de inseguridad. La carta expone las razones por las qué la mujer abandonó la Iglesia protestante, y la foto de la carta se hizo viral. El sobrino de la mujer la publicó en Facebook, un grupo LGBT, Enough is enough, la resposteó y se compartió miles de veces. También de acuerdo con las declaraciones del nieto a Spiegel Online, el entusiasmo de los medios sociales ha hecho muy feliz a la abuela.

Hay que tener en cuenta que en Alemania, a los ciudadanos que declaran ser miembros de una iglesia se les carga un impuesto eclesiástico (Kirchensteuer) en sus declaraciones de impuestos. El Estado tranfiere el impuesto a las autoridades eclesiásticas. Toda persona que renucia a su iglesia -se des-bautiza, apostata- (abtreten) ya no paga el impuesto eclesiástico.

Luego de esto, la Iglesia Protestante reaccionó diciendo que entiende las razones de la abuela y le propone reitegrarse a su seno. En una carta publicada en el sitio evangelisch.de se dice que la homosexualidad no es un pecado y no debe ser curada. La carta termina diciendo que la Iglesia necesita de personas como ella!

No hay comentarios: